Las sentencias judiciales deberían poder ejecutarse más fácilmente en el extranjero. El Convenio de La Haya debería contribuir a ello. Un proyecto de ley del gobierno federal ya está disponible.
A pesar de toda la globalización, la jurisdicción termina en las fronteras estatales. Esto puede llevar a dificultades cuando las sentencias de los tribunales alemanes deben ejecutarse en el extranjero y viceversa. Dentro de la Unión Europea, el reconocimiento y la ejecución de sentencias extranjeras está mayormente regulada, pero más allá de las fronteras de la UE todavía faltan regulaciones uniformes. Esto, por ejemplo, hace difícil la ejecución de sentencias de tribunales alemanes en países fuera de la UE. En consecuencia, a menudo existe una inseguridad jurídica en los conflictos transfronterizos. Esto debería cambiar con la implementación del Convenio de La Haya sobre el reconocimiento y ejecución de decisiones extranjeras en asuntos civiles y comerciales.
El convenio fue adoptado en julio de 2019 y la Unión Europea ha dado luz verde para su adhesión al convenio. El gobierno federal ha presentado ahora un proyecto de ley correspondiente.
El núcleo del Convenio de La Haya se centra en el reconocimiento y ejecución de sentencias en asuntos civiles y comerciales entre los Estados de la UE y otros Estados partes fuera de la Unión Europea. El reconocimiento y la ejecución de estas sentencias, pero también sus límites mediante obstáculos de reconocimiento uniformes, deberán ser asegurados. Así, se pretende crear más seguridad jurídica y previsibilidad en los litigios transfronterizos y ahorrar tiempo y costos.
Según el convenio, las decisiones de los tribunales extranjeros, más allá de los obstáculos de reconocimiento previstos, ya no se revisarán en cuanto a su contenido. Si existe un obstáculo de reconocimiento, el reconocimiento y ejecución de la sentencia extranjera puede ser denegado. Además, el convenio prevé varias excepciones.
Con una serie de terceros países fuera de la Unión Europea, Alemania ha establecido convenios bilaterales para el reconocimiento y ejecución de las sentencias. Los acuerdos cambiantes entre los estados deben ser considerados cuando las sentencias judiciales deben ser ejecutadas internacionalmente.
Una alternativa adecuada a un procedimiento judicial puede ser un arbitraje. Los laudos arbitrales se reconocen en la mayoría de los países y suelen ser más fáciles de ejecutar que una sentencia judicial.
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